Esta técnica se consigue con un eye-tracker, un aparato que incorpora micro-proyectores de infrarrojos y sensores ópticos, además de software con capacidad de procesamiento de imágenes y de cálculos matemáticos. Los micro-proyectores proyectan rayos infrarrojos que son reflejados por los ojos del usuario. Esta reflejo es captado por los sensores ópticos del eye-tracker y, mediante procesamiento de imagen y cálculos matemáticos, se identifican los patrones de la mirada del usuario y establece en tiempo real exactamente la posición de los ojos y de la mirada. El eye-tracker y el software que lo acompaña proporcionan diferentes datos de tipo gráfico o audiovisual.
En concreto, el CITM ha incorporado un eye-tracker modelo Tobii Studio X2 30 y los dispositivos necesarios para poder hacer el seguimiento de la mirada tanto sobre pantallas de ordenador de sobremesa, como de dispositivos móviles tipo smartphones, tablets, etc . Desde el Laboratorio de Interacción Humano-Computadora del CITM contamos con todo el equipamiento para hacer test de usabilidad óptimos en todo tipo de webs, banners, redes, videojuegos, apps y otras aplicaciones.